Excelente alojamiento en Marruecos
Nota de prensa
Rabat, con una población de más de un millón y medio de habitantes, es la capital de Marruecos y la segunda ciudad con más densidad de población después de Casablanca. En ésta ciudad se encuentra la Torre de Hassan y el mausoleo de Mohameed V, dónde reposa el difunto; la necrópolis de Chella, edificada en 1339; y la mezquita de Agadal. Para visitar éstos sitios de interés, lo mejor es alojarse en hoteles en Rabat mismo o en Riads, como se denominan los antiguos palacetes marroquíes con un jardín en el centro y que, normalmente, se encuentran en el casco antiguo de las ciudades.
En la página www.hoteles-marruecos.com se pueden encontrar hoteles y lujosos Riads a muy buen precio y con toda garantía. Pero no sólo disponen de alojamiento en la capital del Reino Marroquí, sino que también ofrecen hoteles en Marrakech, Tánger, Ouarzazate, Agadir y Fez, así como Riads en Marrakech y las demás poblaciones, entre muchos otros destinos posibles. Desde la compañía ofrecen un trato muy cercano al cliente y de un altísimo nivel.
En muchos de sus destinos existe la posibilidad de contratar un guía marroquí que habla español y puede enseñar la ciudad desde su particular punto de vista e incluso echar una mano al turista a la hora de regatear, una práctica muy poco común entre los españoles. En la ciudad de Marrakech, por ejemplo, podemos encontrar Riads en el mismísimo centro de la antigua Medina, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985. Además de eso, junto a la reserva del hotel, en www.hoteles-marruecos.com te vienen a buscar en el aeropuerto y, si es necesario, te llevan hasta la puerta del hotel en un lujoso monovolumen, un detalle muy importante si tenemos en cuenta que en las estrechas calles de la Medina abundan las motocicletas, los hombres a pie, o incluso montados en burro.
No obstante, también te proporcionan excusiones en Marrakech: como una ruta de senderismo por la montañosa cordillera del Atlas, que puede alcanzar más de 4.000 metros, y dónde el visitante podrá conocer las auténticas familias beréberes y probar su aromático té o comprar algunas de sus artesanías. Y es que, en Marruecos, todo es posible.
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albatros -